La temperatura normal de un vehículo es de 90 grados. Y si sube o baja, el motor puede sufrir y hay piezas que pueden verse dañadas. Vamos a explicarte cómo evitar el calentamiento del motor, los consejos que hay que tener en cuenta para prevenirlo y también consejos por si esto sucede. Todo ello para poder evitar arreglos y averías que al final te van a conllevar un gasto elevado.
En las próximas líneas, vamos a aportar diferentes consejos para prevenir el sobrecalentamiento que puede sufrir tu coche y, además, te indicaremos cómo debes actuar cuando el motor llegue a esta situación.
El refrigerante es un líquido fundamental para que el motor de tu vehículo se mantenga a la temperatura correcta, sobre todo en los días de más calor del año. Por eso, es importante que verifiques una vez al mes este elemento para no tener problemas de sobrecalentamiento.
Si, por lo que sea, tu vehículo ya se ha sobrecalentado, acude rápido al taller para que miren si los niveles de refrigerante son correctos.
Hay aspectos del sistema de enfriamiento del coche que pueden estropearse, como las mangueras del radiador o la tapa del mismo. ¿Qué hay que hacer? Debes revisar el sistema completo cada 1 o 2 años para comprobar que todo está en orden y que no hay ninguna pieza que ajustar o que cambiar.
Como sucede con el refrigerante, si has notado que tu vehículo ha subido mucho de temperatura, debes revisar este sistema. Consulta qué hacer cuando se calienta el motor del coche y ya no puedes recurrir a consejos de prevención.
El aire acondicionado puede llegar a sobrecalentar el coche, de manera que te recomendamos que lo alternes con la apertura de las ventanas para mantener el interior del coche a una temperatura agradable.
Si el coche sube de temperatura, tienes que apagar el motor y, aunque te vaya a parecer un poco extraño y contradictorio, apaga el aire acondicionado y enciende la calefacción. Esto va a ayudar a que el calor del motor se disipe y, por lo tanto, el vehículo se enfriará.
¿Qué consigues al conducir a una velocidad constante? Que la carga del motor no sea tan alta y, por lo tanto, evitar el sobrecalentamiento. Además, también te recomendamos que evites acelerar y frenar de forma muy brusca. Estos actos fuerzan el motor y hacen que su temperatura se eleve.
Aparcar en la sombra siempre es la mejor opción; así, cuando te subas al coche, la temperatura del interior será un poco más baja. Puede parecer que no, pero que toda la zona del motor de tu vehículo esté al sol después de que hayas recorrido muchos kilómetros con él puede ser bastante perjudicial.
En cualquier caso, si has notado una subida de la temperatura en tu coche debes estacionar en un lugar alejado del sol, apagarlo y abrir el capó durante una media hora más o menos hasta que veas que se ha enfriado.
El peso que vayas a añadir a tu coche puede motivar el calentamiento del motor. ¿Por qué? Porque haces que el motor tenga que trabajar de forma extra.
Con esto no nos referimos solo a cargas en remolques, sino también a objetos muy pesados en el maletero o en la parte de atrás del habitáculo. Debes tener en cuenta el peso que puede soportar tu coche, sobre todo si va lleno en lo que se refiere a pasajeros.
En ocasiones, cometemos el error de pensar que podemos meter cualquier cosa en un vehículo y no hay nada más alejado de la realidad. Por ejemplo, electrodomésticos o cargas muy amplias deberían ir siempre en furgonetas u otro tipo de coches preparados.
Una puesta a punto correcta puede evitar muchos problemas en un coche; por eso, debes acordarte de revisar tu vehículo de forma periódica para encontrar cualquier fallo o problema que pudiese tener.
Si vas conduciendo y ves algo de humo, vapor o notas que hay fugas en el motor, te vamos a dar el mejor consejo que podemos: no continúes con la ruta. En este caso, deberás llamar a una grúa para que lleve tu vehículo a un taller. Forzarlo y seguir conduciéndolo pueden hacer que el motor se estropee del todo o provocar averías mucho peores de lo que pueden ser en un principio
Como has podido ver, hay consejos y trucos que puedes tener en cuenta para que tu coche no se sobrecaliente y, por lo tanto, su motor no sufra. Si haces caso de estos consejos, no tendrás que preocuparte cuando salgas a la carretera, especialmente en los meses más cálidos.