La pregunta sobre si el detector de radares es legal sigue generando dudas entre los conductores, especialmente ante la amplia oferta de dispositivos que alertan sobre la presencia de radares fijos o móviles. La Dirección General de Tráfico (DGT), a través de la reforma de la Ley de Seguridad Vial en 2021, aclaró esta cuestión: el uso de detectores de radares está prohibido, independientemente del tipo de radar. A continuación, te explicamos lo que dice exactamente la normativa y qué dispositivos están permitidos según la ley.
Un detector de radares es un dispositivo electrónico diseñado para identificar la presencia de radares de velocidad, tanto fijos como móviles, instalados por la Dirección General de Tráfico (DGT) en las carreteras. Su función principal es alertar al conductor con antelación para que reduzca la velocidad antes de ser captado por el radar.
Existen diferentes tipos de radares en las vías, que son los encargados de medir la velocidad de los vehículos y de multar a aquellos que sobrepasan el límite de velocidad establecido para esa vía.
La base de su funcionamiento es la detección de las ondas electromagnéticas que emiten los radares, conocidas como bandas de frecuencia (como las bandas X, K y Ka). Estas frecuencias son utilizadas por los radares cinemómetros para medir la velocidad de los vehículos en circulación.
Los detectores de radares operan de forma pasiva: escanean constantemente el entorno en busca de señales de radar activas. Cuando el dispositivo identifica una señal compatible con las utilizadas por los radares de tráfico, emite una alerta acústica o visual para advertir al conductor, siendo especialmente eficaz con los cinemómetros móviles.
Además de ser ilegales, estos dispositivos no son 100% fiables. Sí que detectan los radares fijos y los móviles, pero no tienen control sobre otros métodos:
Avisar de la ubicación exacta de un radar fijo es legal, se trata de información pública que #DGT difunde aquí ▶️📶https://t.co/UFXFh5Icq4.
Usar detectores e inhibidores no.✅Avisador
❌Detector
❌Inhibidorhttps://t.co/s2MctVYsjt #MejorMásDespacio💟 pic.twitter.com/VDFcr28Snw— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) January 30, 2021
La respuesta rotunda de la DGT en la citada ley fue el castigo severo de su uso, tanto de detectores portátiles como de aquellos que se hayan instalado en el vehículo. Y fue un paso más allá: si ya estaba prohibido su uso en la ley anterior, a partir de ahora también será motivo de sanción llevar uno de estos dispositivos en el coche, aunque no se esté utilizando.
La multa por llevar o usar este tipo de detectores se eleva hasta los 500 euros, más la consecuente retirada de tres puntos del carnet. Pero estas sanciones se elevan si el conductor lleva un inhibidor de radares en el vehículo. Su uso puede suponer una multa de entre 3000 y 6000 euros, y la retirada de hasta seis puntos del carné. Además, el taller que haya instalado un inhibidor en un vehículo puede enfrentarse a una multa de hasta 30 000 euros.
Una vez que sabemos que el uso de detectores de radares e inhibidores está prohibido por la legislación vigente, es fundamental entender bien qué dispositivo podemos utilizar legalmente en la conducción, y qué consecuencias pueden derivarse del uso indebido de otros sistemas.
Conocer las diferencias entre avisadores, detectores e inhibidores de radares no solo nos ayuda a evitar sanciones, sino que también nos permite hacer un uso responsable de la tecnología en carretera.
Como su propio nombre indica, detecta la ubicación del radar rastreando el campo electromagnético. El aparato no interfiere ni manipula el radar, simplemente avisa al conductor al detectar su señal. La Ley de Seguridad Vial prohíbe expresamente su uso, ya que su función se considera una ventaja desleal frente al control del tráfico.
Las sanciones son mucho más graves que con los detectores, esto se debe a que en este caso sí se interfiere en el funcionamiento del radar, impidiendo que este detecte la velocidad y, por lo tanto, no suponga una sanción. Bloquea activamente la señal del radar, por lo que actúa directamente contra la autoridad de control y por ello están considerados una infracción muy grave.
Esta es la opción legal. Se trata de un dispositivo GPS que avisa a través de alertas de la ubicación de un radar fijo o de tramo. Se basa en la información que la DGT proporciona en su propia web, de ahí que no haya inconveniente en usarlo durante la conducción.
Conducir con responsabilidad no solo implica respetar los límites de velocidad, sino también conocer qué tecnologías están permitidas por la normativa vigente. Mientras que los avisadores de radares son herramientas legales y útiles para fomentar una conducción segura y preventiva, el uso de detectores e inhibidores está expresamente prohibido por la DGT y puede acarrear sanciones económicas, pérdida de puntos e incluso consecuencias más graves.
Antes de instalar cualquier dispositivo en tu vehículo, infórmate bien sobre su funcionamiento y su estatus legal. Apostar por soluciones legales como los avisadores no solo te ayudará a evitar multas, sino que también contribuirá a una circulación más segura para todos.
