En los últimos años estamos asistiendo a un gran avance tecnológico en la movilidad urbana. La tecnología Car2x es solo una de las novedades más destacadas dentro de las irrupciones que se están viviendo en la comunicación entre vehículos y los elementos de las infraestructuras urbanas o metropolitanas. Además, en este caso, para potenciar la seguridad viaria, en un contexto en el que preocupan, y mucho, los accidentes de tráfico tras surgir nuevas formas de movilidad en diferentes espacios.
¿Qué es la tecnología Car2x?
El sistema de comunicación Car2x es uno de los más potentes y que más trayectoria tienen para mejorar la seguridad en las carreteras de nuestro país. Este consiste en la sincronización entre un coche y la infraestructura presente en las carreteras (radares, señales o cámaras) para intercambiar información con el objetivo de reducir el riesgo de asistir a atascos y, sobre todo, de sufrir accidentes. Conviene apuntar que la comunicación también puede darse entre vehículos, por lo que las ventajas de este sistema se multiplican.
No solo se trata de un sistema que persigue minimizar la probabilidad de sufrir un siniestro, sino que advierte al conductor de incidencias en la vía. Esta tecnología no es una novedad, ya que han existido sistemas similares desde principios de los años 2000 que pueden ayudar al conductor a detectar puntos ciegos o accidentes.
No obstante, los avances acontecidos en los últimos años van un paso más allá al permitir cierta autonomía al vehículo en diversas acciones, con la consiguiente mejora en la seguridad y el incremento de confort al conducir. Todo en aras de maximizar la seguridad y aminorar la congestión vehicular.
Aplicaciones de la tecnología Car2x en vehículos actuales
Entre los usos más evidentes o beneficiosos para el conductor, destacan los que siguen:
- Advertencias de obras en la vía pública. Por tanto, se pueden sortear obras o incidencias de última hora sin necesidad de estar informados por otros medios.
- Sensores que envían información al vehículo sobre la temperatura del asfalto. De este modo el conductor sabe el nivel de agarre esperado. Algo especialmente útil en zonas de montaña, donde se alcanzan temperaturas muy bajas.
- Semáforos inteligentes que, dependiendo de la intensidad de tráfico existente, acomodan el funcionamiento con el objetivo de evitar atascos. Así es posible conceder más tiempo a los vehículos en determinados cruces o disminuir el tiempo, en horas valle, de los pasos de peatones.
- Sistemas de alerta en caso de que se produzcan retenciones o accidentes en la vía.
- Detectar espacios libres de aparcamiento, sobre todo, en las ciudades, para optimizar el tiempo y la circulación.
¿Qué ventajas tiene la comunicación de los vehículos con su entorno?
Entre sus ventajas, merecen una especial atención las siguientes:
- Comodidad y facilidad. El sistema favorece una conducción más cómoda, segura y fácil. Los conductores pueden saber cuándo relajarse en la conducción y cuándo estar más alerta.
- Autonomía. La tecnología empleada envía y recibe las alertas de manera autónoma. El conductor no necesita encargarse, y menos conduciendo, de enviar información a otros conductores o a los sensores. En definitiva, se ocupa solo de conducir y de estar pendiente del tráfico.
- Seguridad. Sin dudarlo, el punto positivo prioritario es el incremento de la seguridad. El sistema provee de información de la vía en directo, completamente actualizada en todo momento y se conecta con otros conductores. Así, en caso de ocurrir una incidencia, se puede actuar de manera rápida y rebajar el número de siniestros en carretera.
- Información completa. Este sistema no solo intercambia información con otros coches, también lo hace con el resto de la infraestructura. Esto proporciona una visión integral, que es la que juega en favor de la seguridad del conductor, y del resto de agentes involucrados en la vía.
- El mejor complemento para la conducción autónoma. De hecho, se puede considerar que la comunicación Car2x resulta decisiva para que los vehículos autónomos sean una realidad. Aunque son muchas las condiciones a cumplir, una de las más destacadas es la comunicación con los agentes circundantes.
- Mejora de la circulación en zonas congestionadas. El intercambio de información logra que, en ámbitos especialmente congestionados como las grandes ciudades, se mejore la circulación tanto para evitar zonas con atascos como por las vueltas que muchos vehículos evitan para hallar un hueco para aparcar en la vía pública.
- Mejora de la gestión del coche. Al disponer de información actualizada al instante, podemos aminorar el gasto en combustible y aumentar la comodidad a bordo.
En definitiva, la tecnología Car2x, más que el futuro, es el presente en las vías urbanas y en las carreteras españolas gracias a la comunicación entre vehículos o entre vehículo y la infraestructura habilitada. Sin duda, se trata de un notable avance para esquivar accidentes y lograr una conducción cada vez más cómoda, segura y autónoma y, por supuesto, una oportunidad clave para reducir los atascos y la desinformación en las carreteras.