Viajar en Navidad es un plan muy atractivo. Son escapadas de unos días que permiten conocer sitios bonitos en Navidad en Europa y disfrutar de las fiestas de otra forma. Si te planteas un viaje en estos días, debes saber que encontrarás grandes ventajas. La primera, muy importante, es que en Navidad resulta más barato viajar: los billetes, los alojamientos y las atracciones son más asequibles. Además, descubrir un lugar nuevo en Navidad es una experiencia, porque encontrarás costumbres y tradiciones navideñas sorprendentes. ¡Toma nota de nuestra selección de destinos!
Europa está llena de fantásticos destinos para un viaje navideño, ciudades con historia que se ponen sus mejores galas para las fiestas y te ofrecen una inesperada alternativa de la Navidad más tradicional. Estas son algunas de las mejores.
Empapada de las culturas francesa, suiza y alemana, esta zona, cuya capital es Estrasburgo, es un excelente destino navideño. Aunque se puede ir en coche o tren, lo mejor es llegar en avión: varias compañías vuelan desde Madrid, Barcelona y otras ciudades y, en poco más de una hora, estarás respirando el aire fresco de la navidad alsaciana, uno de los destinos navideños más reconocidos de Europa.
Una vez en Alsacia, te recomendamos recorrer este territorio salpicado de localidades de aire medieval, como Colmar. Allí, como en Estrasburgo, son célebres los mercadillos navideños en los que podrás disfrutar de su increíble gastronomía de Navidad, con sus brédalas, unos bizcochos típicos de estas fechas, o los pain d’epice, panes con miel y especias.
Si no puedes esperar a que llegue Papá Noel, puedes ir en su búsqueda a Laponia, en Finlandia, donde, según la tradición, tiene su mágico taller de juguetes.
Viajar a Laponia requiere un viaje en avión a lugares como Ivalo o Rovaniemi. Una vez allí, alquila un coche. Pero, ojo, no olvides que viajas al Círculo Polar Ártico: las carreteras pueden tener hielo, así que conduce con precaución.
Destaca Rovaniemi, el lugar que todos tenemos en la cabeza cuando pensamos en la villa de Papá Noel. Y es que, a unos pocos kilómetros de la ciudad está Santa Claus Village, el poblado donde vive este maravilloso ser. Por supuesto, es visita obligada.
Los días en esta época son cortos y fríos, pero hace que se disfrute más la acogedora experiencia de las cabañas de madera con chimenea. ¿Y qué tal un hotel de hielo?
Un destino navideño por antonomasia es Praga, en la República Checa. En Navidad puedes volar a Praga desde los principales aeropuertos de España y, en apenas tres horas, estarás en una de las capitales más bellas de Europa.
En Praga proliferan los mercadillos navideños donde hacer compras. Para reponer fuerzas, no olvides la tradicional cerveza checa o el vino caliente, y otras especialidades de la contundente y sabrosa comida centroeuropea.
Además, Praga es un lugar asequible. Todavía es posible comprar a buen precio objetos de calidad, como el cristal de Bohemia. Así que ten en cuenta este destino si buscas regalos de Navidad especiales. Y, si lo que buscas es cultura, pasear por las calles de Praga es recorrer la historia del continente, que ha quedado plasmada en lugares como el puente de Carlos o el imponente castillo, de origen medieval y considerado el más grande del mundo antiguo.
Uno de esos sitios bonitos de la Navidad europea es Munich, capital de la región alemana de Baviera. Llegar a Munich desde España es sencillo: hay multitud de vuelos directos.
Munich está en el sur de Alemania, cerca de Austria y de ciudades fascinantes, como Nuremberg o Ratisbona. Esa ubicación marca el carácter de una población vitalista, divertida, amante de la gastronomía y, sobre todo, de la buena cerveza y de la Navidad.
Recorrer Munich en Navidad es un deleite: la ciudad está decorada con mimo y cuidado por los detalles, y se llena de increíbles mercadillos navideños. Cuando acabes de visitarlos, guarda fuerzas para lugares como la Peterskirche, la iglesia más antigua, o el Rathaus, el Nuevo Ayuntamiento, con su famosísimo carillón.
Otro viaje muy llamativo para Navidad es escaparse a Londres. A la capital británica llegarás fácilmente en avión desde muchos aeropuertos españoles y encontrarás una urbe llena de atractivos. Y, por supuesto, en Navidad se engalana. Si quieres disfrutar de su espectacular alumbrado, no dejes de pasar por Carnaby Street o Trafalgar Square: sencillamente impresionantes.
También está llena de mercadillos navideños, como los de Hyde Park, Kew Gardens o Winter Market, que abre hasta Reyes. Y, por supuesto, siempre es un buen momento para las tiendas de moda que marcan la tendencia del momento, o los monumentos imprescindibles, como el Palacio de Buckingham.
Si buscas algo más cercano, ten en cuenta el norte de Portugal. Está a solo unas horas en coche y esconde lugares increíbles, como Oporto. Muy cerca puedes visitar Perlim y Sao Paio de Oleiros, donde montan el Belén en movimiento más grande del mundo, toda una atracción para estas fechas.
También cerca está Braga, una hermosa ciudad que es todo un descubrimiento para cualquier viajero. Dinámica y muy poblada, mezcla de tradición -con un magnífico casco histórico- y modernidad cultural, con una pujante universidad y notables museos.
Y si buscas algo más tranquilo, piérdete por los montes: las comarcas del norte de Portugal, el Alto Minho, Trás-os Montes o Duero, son perfectas para recorrer con calma.
Sin salir de España, te recomendamos Vigo, en Galicia. Accesible en coche, tren o en avión, Vigo es todo un atractivo en Navidad. Empeñada en capitalizar estas fiestas, la ciudad hace un impresionante esfuerzo por vestirse con la iluminación navideña más llamativa del mundo.
Pero hay mucho más en tu viaje a Vigo: puedes visitar las Rías Baixas o las preciosas islas Cíes. Y, sobre todo, disfrutar de una gastronomía que da lo mejor de sí misma para Navidad: los más suculentos pescados y mariscos para que las celebraciones sean inolvidables.
Como ves, si buscas lugares bonitos que visitar estas Navidades, tienes multitud de opciones donde elegir. Ciudades de vida frenética y parajes de belleza singular. Elige tu destino y regálate ya esa escapada diferente.
